Virus
Los virus son un grupo aparte, debido a que muchos investigadores consideran que no son seres vivos. Son los microorganismos más pequeños y simples, formados de material genético envuelto en una cápsula de proteína. Nadie sabe por cuánto tiempo han existido en la Tierra o cómo evolucionaron. Se reproducen inyectando sus genes a una célula huésped, para producir cientos de nuevos virus.
Son patógenos para diferentes especies vivientes, desde bacaterias (bacteriófagos), hasta plantas y animales, incluidos los seres humanos. Muchos de ellos pueden mantenerse sin alteraciones en diversos ambientes, como aire, agua y suelo. Para observarlos se requiere un microscopio electrónico.
Las bacterias
Son más grandes que los virus. Fueron los primeros organismos que
habitaron nuestro planeta, hace casi 3.5 millones de años. Cada bacteria es una sola célula procarionte, es decir, la célula más sencilla que carece de núcleo y estructuras especializadas como las mitocondrias. Producen su
alimento, ya sea por procesos químicos o alimentándose de sus huéspedes o materia muerta.
La mayoría son de vida libre, aunque algunas pueden invadir tejidos y enfermar, o vivir en simbiosis, es decir, de manera asociada con otro organismo de distinta especie, recibiendo mutuo beneficio.
Los protozoarios
Son un grupo de organismos unicelulares parecidos a las bacterias, pero 1000 veces más grandes. Los protistas surgieron después de las bacterias, hace casi 1 800 millones de años. Están compuestos por una célula eucarionte, más grande y compleja que la célula de las bacterias y con un núcleo bien definido. Entre ellos podemos encontrar a las algas, amibas y a los paramecios.
Los hongos
Microscópicos tienen en general más de una célula. Se alimentan de la materia orgánica del medio y no tienen manera de desplazarse. Por ello no pueden clasificarse entre las plantas que producen sus propios alimentos, ni entre los animales que pueden moverse. Algunos hongos microscópicos son la levadura, el moho negro del pan y el causante del pie de atleta.